El Deber- A las 20:00, aproximadamente, de este viernes, Isidoro Maita, presidente del presídium del XVIII congreso de la Central Obrera Boliviana (COB) tomaba juramento a la veintena de dirigentes que conforman el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) de la COB; Mario Argollo, ex dirigente de la federación departamental de mineros de Oruro, fue ungido como nuevo ejecutivo del ente laboral.

“Ha hablado el parlamento obrero y seguramente tengamos, de aquí en adelante, que enmarcarnos en nuestro documento político y poder dar la línea de lucha a todo el pueblo boliviano, porque estamos prestos a recibir al nuevo gobierno, pero si se le ocurre ir en contra de los más empobrecidos, aquí va a estar la Central Obrera Boliviana con su CEN, para poder defender todos los intereses de nuestros compañeros”, advirtió Argollo apenas juró al cargo.

De ese modo, llegó a su fin la ‘era Huarachi’ dentro la COB, pues el exdirigente había conservado el poder a pesar de cuatro congresos. Ahora el propio congreso decidió enviarlo al tribunal de honor para procesarlo junto a otros tres dirigentes por haber violentado las reglas internas cobistas.

Argollo había sido nominado por los mineros la mañana de este viernes, pues cada sector que integra la COB debe realizar su propia elección y nominar a uno de sus afiliados a la cartera que les corresponde dentro el CEN. Los mineros tenían cuatro candidatos que se redujeron a dos: Joaquín Mamani, representando a Colquiri, y Mario Argollo, representando a Huanuni, este ganó con 79 votos contra 41 que logró Mamani.

“Vamos a demostrar que los trabajadores, cuando nos organizamos, vamos a ser más fuertes y vamos a estar aquí poniendo el pecho a las balas a cualquier situación que vaya en contra de todos los trabajadores y el conjunto del pueblo boliviano”, remató argollo antes de ser alzando en hombros por sus compañeros de trabajo.

Mientras, el magisterio y parte de otros grupos intentaron impedir la posesión pidiendo que las nominaciones sean sometidas a votación, los maestros gritaban “votación, votación, votación”, mientras el presidente del presídium tomaba juramento a los nuevos ejecutivos cobistas.